Entrevista a Alfonso miranda Eyzaguirre, presidente del Comité de Pesca y Acuicultura de la Sociedad Nacional de Industrias, quien sostiene que al promover el consumo de anchoveta, el Perú no solo ganaría mayores ingresos, sino que podría erradicar la desnutrición y la anemia en el país.
Al promover el consumo de anchoveta, el Perú no solo ganaría mayores ingresos, sino que podría erradicar la desnutrición y la anemia en el país. Así lo sostiene Alfonso Miranda, quien, en entrevista con La República, recordó que esta tarea del Estado ya se realizó en la década de los 70.
¿Cómo cerrará el 2017 las ventas de los productos para consumo humano?
Este año se va a recuperar, lo que no significa que vamos a estar felices por eso. Simplemente se ha detenido la caída, pero estamos llegando a cifras parecidas a las del 2014 cuando deberíamos superarlas. Creo que podemos superar los mil millones de dólares en exportaciones hablando de pesca para consumo humano. El año pasado llegamos a US$ 900 millones. Creo que aún hace falta un impulso del Estado para la pesca.
Existe ya un Decreto Supremo que declara de interés la pesca para consumo humano que data del 2015.
Es un pronunciamiento que ha tenido un sentido emotivo, pero las cifras no han cambiado. Cuando se quiso hacer este pronunciamiento, nosotros (la SNI) pedimos la priorización de la pesca para consumo, pero no se dio.
¿Qué experiencias en la región se han visto sobre lo que usted propone?
En los 70, nadie consumía jurel ni caballa en Perú. Sin embargo, la política de Estado de ese momento dijo «hay que alimentar a los peruanos con este producto», porque era abundante en nuestro mar. Entonces se dictaron políticas públicas que permitieron que haya una cadena de frío en la costa y sierra y el Perú se convirtió en un gran consumidor de jurel. Tanto así que ahora se importan 60 millones de kilos de jurel al año, porque ya nos acostumbramos a comer jurel. En este caso, la anchoveta es uno de los mejores alimentos de la humanidad, que debería alimentar a los peruanos.
¿Cuál ha sido el consumo de los peruanos de la anchoveta?
Lamentablemente, al no existir un mercado de inicio, la demanda es inconsistente. Se necesita la articulación del Estado. Si hoy se define esta política de Estado y los programas sociales pudieran dar anchoveta a los niños y en los cuarteles se diera anchoveta se generaría este mercado y los peruanos apreciarían lo que el mundo hoy aprecia. Una vez que se encienda esta chispa, por supuesto que el ama de casa lo comprará.
Entiendo que el sector privado también ha fomentado el consumo de anchoveta en el país. ¿No ha funcionado?
El sector privado no ha sido capaz de sistematizar eso. Es por ello que el Estado debe hacerlo. La anchoveta tiene condiciones extraordinarias para consumirla. Falta ponerla en acceso al público y que haya un abastecimiento constante.
¿Qué problemas solucionaría el país al consumir anchoveta?
Al Bicentenario de la Independencia del Perú podríamos llegar a desterrar virtualmente la desnutrición y la anemia, que hoy tiene tasas altas. Creo que el esfuerzo que tenemos que hacer se justificaría si es que esto nos lleva a frenar la mala alimentación. Nadie se puede oponer a eso.
¿Y por qué cree que este año no se ha promovido una política de Estado?
Hubo buenas intenciones, pero no basta. Hay que desarrollar una política que simplemente invitar a los industriales a invertir al consumo humano. Hay que desarrollar esta política.
¿No será que no se quiere quitar el recurso a la industria de la harina de pescado, que le genera divisas al país?
Eso es una falsa creencia. La anchoveta para consumo humano es rentable para el Perú. No obstante, es más laboriosa. El rendimiento por tonelada es más rentable. Es más rentable para el industrial y es más rentable para los peruanos, que somos los dueños del recurso. En otros países la participación de la pesca para consumo es mayor que la de harina. Lo que no significa que debamos bloquear la industria harinera.