Lima, 05 de octubre de 2018.- Los aportes regulatorios que realiza la industria de ingredientes marinos (harina y aceite de pescado) al Estado han incrementado su importancia en la estructura de costos en el periodo 2008-2017, señaló hoy un informe elaborado por Apoyo Consultoría, por encargo de la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP).
Ello a pesar de que la industria ha experimentado una reducción importante en su rentabilidad en el último quinquenio, debido a la caída en 40% de los desembarques de anchoveta, lo cual se atribuye a factores climatológicos y limitaciones de la política regulatoria, sostiene el informe.
Apoyo Consultoría indica que existe claramente una reducción del margen operativo de las empresas pesqueras en quince puntos porcentuales en el periodo 2008 – 2017, en línea con la caída promedio en 6% anual de los desembarques del recurso anchoveta.
“Los indicadores de rentabilidad como el margen neto, rentabilidad sobre activos (ROA) y rentabilidad sobre patrimonio (ROE) se han deteriorado significativamente. Este escenario desfavorable ha motivado el incremento de apalancamiento por parte de las empresas pesqueras”, anota.
Según la consultora, bajo un escenario de 4 millones de TM de desembarque anual de anchoveta en el período 2019-2022, el retorno de la industria pesquera peruana podría recuperarse, pero continuaría siendo menor al de otras industrias extractivas, como minería, hidrocarburos y forestal. Sin embargo, de presentarse un escenario de regulación adversa y estrés económico, el retorno podría reducirse significativamente.
“Si bien para el 2018 se espera una recuperación del sector, se prevé que no sea suficiente para que los accionistas obtengan retornos por su inversión que les ayude a suplir los años malos”, anota el informe.
De acuerdo con Apoyo Consultoría, mientras en 2016 las empresas pesqueras nacionales pagaron US$16.7 por tonelada métrica (TM) de anchoveta, en Chile el pago fue de US$13.8 por TM. Esta diferencia se explicaría porque la industria peruana asume una mayor carga por concepto de fiscalización pesquera y aportes sociales.
Mesa por la competitividad
En este contexto, la presidenta de la SNP, Elena Conterno, informó que el sector ha planteado formalmente la conformación de una mesa de competitividad de la industria de ingredientes marinos, debido a la disminución de las capturas, el deterioro de indicadores de rentabilidad y el incremento del apalancamiento, lo cual implica la pérdida de valor de las acciones de las empresas pesqueras que cotizan en el mercado bursátil y también de las que no cotizan.
“Existe el mito de que esta es una industria boyante pero la realidad nos muestra todo lo contrario. Lo que tenemos es una industria con altos costos fijos, alta volatilidad, poco potencial de crecimiento, fuerte competencia de sustitutos, y que no está dando retorno a sus inversionistas”, explicó.
Al respecto, recordó el informe elaborado por EY sobre las cargas tributarias y algunas obligaciones legales del sector pesquero, el cual revela que en un escenario de 4 millones de TM de captura anual de anchoveta, las empresas pagan el 50.4% de su utilidad operativa, mucho más que otras industrias extractivas.
“Otro aspecto a valorar es la incertidumbre actual a la que se enfrenta el sector pesquero en general frente al cambio climático y una posible llegada del fenómeno El Niño a nuestro litoral”, sostuvo Conterno.
Finalmente añadió que una medida que podría ayudar a mejorar la competitividad de la industria de ingredientes marinos es volver a un ordenamiento pesquero en la zona sur que permita un aprovechamiento del recurso sin poner en riesgo su sostenibilidad, pero generando un impacto económico positivo, tanto para las empresas como para los trabajadores y ciudadanos.