Mañana se inicia la segunda temporada de pesca en la región norte-centro del país, y para ello el Ministerio de la Producción (Produce), sustentado en los estudios científicos del Instituto del Mar del Perú, ha asignado una cuota de 2786,000 millones de toneladas de captura de anchoveta, cifra que, para la segunda temporada, es la mayor de los últimos 10 años.
Este volumen de captura permitido es muy auspicioso, pues demuestra que, gracias a las políticas precautorias que ha implementado el Estado junto con las acciones de sostenibilidad emprendidas por la industria pesquera, la biomasa de la anchoveta se encuentra en óptimas condiciones.
En efecto, el establecimiento de la ley de cuotas, y el hecho de permitir solo capturas de hasta el 35% de la biomasa, sumado a la protección de juveniles, hacen posible que la sostenibilidad del recurso se encuentre asegurada.
Por otro lado, la segunda temporada tendrá un impacto positivo en la vida de los peruanos y peruanas que viven en las zonas costeras y las zonas aledañas, ya que es bien sabido que la pesca es un dinamizador de la economía en los lugares donde se realiza esta actividad, toda vez que por cada empleo generado en la pesca se crean 3 empleos adicionales, tal como lo confirma un estudio del Instituto Peruano de Economía.
Asimismo, estimamos que esta temporada tendrá también un impacto positivo en las cuentas fiscales, toda vez que proyectamos que se generarán alrededor de 3740 millones de soles en exportaciones de harina y aceite de pescado.
Por lo anterior, podemos decir que, a pesar de los vientos turbulentos que vienen desde China, aquí en el Perú podríamos estar dando la bienvenida a los buenos tiempos.