El mar de Tumbes, por su baja profundidad dentro de las cinco millas, es un espacio privilegiado para el desove y reproducción de especies marinas. Sin embargo, toda su biodiversidad es amenazada por 128 embarcaciones que pescan ilegalmente toneladas de recursos sin control.
Dentro de las cinco millas del mar de Tumbes realizan pesca ilegal al menos 128 embarcaciones que aplican el método de pesca por arrastre y mediante redes de cerco, lo cual está penado por ley.
La Dirección de Producción de Tumbes detalló que de este total 73 embarcaciones tienen autorización solo para pescar fuera de las cinco millas, 8 están realizando el trámite, y 47 operan al margen de la ley. Sin embargo, el director de la institución, Sergio Sandoval Mogollón, reconoce que todas pescan en la zona prohibida.
“Aun así que ya están formalizadas [ingresan], será por el tema del costumbrismo, será por el tema de que acá dentro de las cinco millas hay producto, se meten, pero estamos trabajando junto con Capitanía, junto con Fiscalía, junto con el Ministerio de Producción, para tratar de erradicar. Tenemos un problema sí, pero ya es un tema logístico, por un tema logístico no podemos cubrir toda la región”, expresó.
POCA FISCALIZACIÓN
La pesca de arrastre y con redes de cerco arrasa con los huevos y ejemplares juveniles poniendo en riesgo a todas las especies marinas. Sandoval añade que en Tumbes solo han hecho operativos en tierra, y que para este año recién están planificando operativos dentro del mar.
“Nuestros operativos han sido en tierra, como dirección regional hemos tenido 24 fiscalizaciones. Hemos decomisado pescado, conchas, cangrejos, langostinos, pota, y pulpo. No llevaban guía de procedencia, no sabían cómo justificar que el producto era legal y simplemente lo decomisamos. O mayormente cuando lo hacen embarcaciones informales,. o cuando no encienden su sistema satelital, y no pueden demostrar de dónde es que han pescado”, explicó.
Los pescadores artesanales de Zorritos están en contra de la formalización de las bolicheras y arrastreras aduciendo que no tienen sustento técnico. Miguel Martínez Pintado, presidente de la Asociación de pescadores artesanales de Contraalmirante Villar, sostiene que estas embarcaciones incumplen las normas.
“Hay denuncias de algunos ecologistas que llegaron a la zona Tumbes, y encontraron que algunas embarcaciones que estaban trabajando dentro de las cinco millas, supuestamente contaban con su sistema satelital. Pero la sorpresa fue que el satelital estaba inoperativo. Entonces eso significa que hay embarcaciones que están trabajando dentro de las cinco millas a pesar de tener su satelital y que posiblemente lo manipulan en complicidad con funcionarios del más alto nivel, porque verdaderamente nos hacen caso omiso a todas las quejas que estamos haciendo”, manifestó.
ESPECIES EN RIESGO
La pesca ilegal e informal en Tumbes captura, por jornada, desde 20 toneladas de especies, en tallas pequeñas, como chiri, lomo negro, Sierra, Pampano, Corvina, Cachema, entre otras; las mismas que por su tamaño son arrojadas al mar. Esto genera depredación, contaminación y desplazamiento forzoso. Santos Ramírez Amaya, presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales de Canoas de Punta Sal dice que su pesca ha disminuido en un 50 %.
“Acá tenemos embarcaciones que sí depredan nuestro mar, como son los boliches, entran a zonas donde desova el pescado, y todo lo matan porque tienen unas mallas muy pequeñas. Porque en realidad las cosas si vamos a seguir a este ritmo dentro de un año ya no tenemos productos hidrobiológicos que ir a pescar. Las especies que están en riesgo son la corvina, el suco, la sierra, el bonito porque las llamadas bolicheras lo matan todos. Ya tenemos como dos años que la pesca ha bajado 50 %, antes mi embarcación traía 200 o 150 kilos, y ahora 50 o 40 kilos, lo cual no alcanza ni para los gastos de la embarcación”, lamentó.
Julio Quiroga Antón, presidente de la Asociación de Cortineros de Cancas, también pide más control pues los artesanales pasaron de pescar 200 kilos a 50 kilos por la disminución de los cardúmenes.
“[Necesitamos] un patrullaje más efectivo desde Cancas hasta Puerto Pizarro para que esta depredación baje un poco. Las embarcaciones, tanto el arrastre como el boliche, son foráneas de otros departamentos que vienen y depredan nuestros recursos. Los recursos que se están perdiendo son la corvina y el suco, que ya no se ven en Tumbes. Antes se veían 100 o 200 toneladas, pero ahora con las justas se ven 100 kilos”, expresó.
CAPTURA INDISCRIMINADA
La Capitanía del Puerto de Zorritos informó que en el 2021 intervinieron 11 embarcaciones bolicheras y arrastreras dentro de las cinco millas. Además, impusieron 324 papeletas por no tener permisos de pesca, zarpe, u otra vulneración a la norma. Sin embargo, el experto en ingeniería pesquera de la Universidad Nacional de Tumbes, Martín Amaya Ayala, dijo que la captura indiscriminada continúa por una débil fiscalización.
“La autoridad marítima, que en este caso es la Capitanía del Puerto de Zorritos, debe apoyar en ese sentido, porque yo he escuchado que en algunas oportunidades, a algunos profesionales del Ministerio de Producción, que a veces no salen a hacer patrullaje porque no tienen el apoyo. O sea, quien debe hacer esa vigilancia deben ser los fiscalizadores del Ministerio de la Producción con el apoyo de la Capitanía”, sugirió el experto.
Solicitamos la participación de la Fiscalía de Medio Ambiente de Tumbes en este informe sin embargo no obtuvimos respuesta favorable. Mientras no haya un verdadero control la producción de la pesca informal e ilegal seguirá llegando a los desembarcaderos formales de Puerto Pizarro, La Cruz, 19, Caleta Grau, Zorritos, Acapulco y Cancas, en Tumbes; y desde allí se repartirá a los mercados de Ecuador, Piura, Lambayeque, La Libertad e incluso Lima sin saber que podrían ser últimos ejemplares que se saborean en su mesa.
FUENTE: RPP